viernes, 29 de agosto de 2008

Cuando lo cotidiano muere

La cotidianeidad endurece las almas, no las deja ser libres, las deshumaniza y las convierte en esclavas del egoísmo y la discriminación, del odio y del miedo. En la vida cotidiana hay miles personas que no saben escribir, poco importan los valores del otro, poco importa la gente que vive en la calle, poco importa la vida, porco importa aquel que tiene frío o que está solo.
Es un mundo grande, inmenso que a la vez no tiene espacio para lo propio, ni tiempo y así el mundo grande comienza a achicarse, molesta, aprieta.
En la Estación Central de Río de Janeiro ante los ojos de Dora pasan rostros, historias, analfabetos, pasan delitos, muertes e injusticias, también pasa la felicidad y la esperanza, todas estas cosas las escribe Dora, en forma de carta, en la Estación Central de Río.
Quizá entre tanta crudeza la esperanza y la felicidad pasen desapercibidas. También pasa desapercibida, como sin importancia, la vida y el futuro de aquel niño que perdió a su madre, que busca a su padre y necesita de Dora para encontrarlo, de aquel niño que recién sale al mundo y lo mira con esperanza.
En la vida cotidiana, Dora es capaz de traicionar de la manera más cruel a Josué.
Quizá sean más fuertes los sentimientos que están libres. A Dora le costó, pero con un viaje se reencontró con su interior, recuperó sus valores. Dora y Josué emprendieron un viaje en busca del padre de él, un viaje hacia el fin del mundo y es ahí, en el fin del mundo, donde lo cotidiano muere, donde el pasado no importa, donde todo queda atrás y en ese momento el amor, la compresión y la felicidad se perciben claramente.
Cuando lo cotidiano muere Dora se reencuentra con una mujer, se pinta los labios y comienza una nueva vida y sonríe y escribe una carta. Cuando lo cotidiano muere él y ella ya no están juntos por necesidad, lo están por amistad.

2 comentarios:

marcos dijo...

buenisimoooooo...! mejoraste la forma de escribir! note que perseguiste una idea y lo trabajaste muy bien a lo largo del texto! EXTERMINEMOS LO COTIDIANO! aunque lo cotidiano siempre va a estar incansablemente tocando las puertas de nuestras almas...!
nos vemoooooooooo!
marcos.-

marcos dijo...

tampoco no me vendiiii cheee solo coloque las cosas en su lugar... de vez en cuando hace falta ordenarse para poder asi desordenar con total libertad! jeje
nos vemos en la cursadaaa!
o con alguna cervezaaa
jijijijij